La semana pasada se vivió uno de los momentos más emotivos de todo el curso. Nuestra compañera Lola volvió a ver a su hijo después de 18 largos años. Todo gracias a la ayuda de sus compañeras y a una herramienta indispensable hoy día: Internet. El relato de la búsqueda y el reencuentro lo dejo en manos de las alumnas. Aquí dejo escrita una poesía dedicada a ese ser extraordinario que nos lo da todo sin pedir nada a cambio: LAS MADRES.
Sólo el amor de una Madre te apoyará,
cuando todo el mundo deja de hacerlo.
Sólo el amor de una Madre confiará en ti,
cuando nadie otro lo hace.
Sólo el amor de una Madre te perdonará,
cuando ninguno otro entenderá por qué.
Sólo el amor de una Madre te honrará,
sin importar en qué pruebas has estado.
Sólo el amor de una Madre resistirá,
durante todo el tiempo y a cualquier prueba.
No hay ningún otro amor terrenal,
más grande que el de una Madre.
Sin duda, la mejor noticia desde que comenzamos el Taller. ¡Enhorabuena, Lola! Nos alegra muchísimo la noticia.
ResponderEliminarLa verdad que quien lo iba a pensar! A sido muy emotivo ese encuentro, y todos estamos muy contentos de que nuestra compañera pueda disfrutar de su hijo.
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