lunes, 28 de junio de 2010
Los primeros seis meses del Taller según Pilar
Ya han pasado seis meses desde que empezamos este curso. Primero empezamos con el replanteo, yo no tenía ni idea, pero nuestra monitora que era Toñi nos ayudó. Comenzamos poniendo en práctica todo lo que habíamos aprendido en unos solares. Después de estos seis meses hemos terminado el jardín de la Ermita, con mucha ilusión, y estamos esperando el día en que todos los vecinos del pueblo puedan verlo, ese día será el de la romería, en plenas fiestas de Algorfa. Nosotras esperamos que sea del agrado de todo el mundo, hemos intentado crear un jardín mediterráneo, ideal para el descanso y el relax. También damos diferentes asignaturas con nuestra profesora María, lo que nos viene de maravilla, ya que muchos de nosotros estábamos muchos años sin estudiar. Además, algunos nos cuestionamos presentarnos algunas pruebas para estudiar aquello que siempre hemos querido, pero no nos hemos sentido capaces de hacer, ahora estamos más abiertos al conocimiento.
jueves, 24 de junio de 2010
OBRAS EN LOS SALONES PARROQUIALES.
Esta semana hemos comenzados con los trabajos de solados y alicatados en los Salones Parroquiales.
En los trabajos de solados, el primer trabajo a realizar es la obtención de la escuadra o "linea maestra", para poder colocar todo el pavimento, con coherencia, sin que se vean falsas escuadras o cuñas en el pavimento. La linea que hemos tomado ha sido el tabique que forma el pasillo.
Como la semana pasada procedimos a colocar la capa de relleno y la capa de mortero de regularización, se ha optado por colocar el pavimento mediante capa fina de mortero cola y utilizando la llana dentada y la maza de goma. Para cortar las diferentes piezas que deben ajustarse a distintas colocaciones, utilizamos la maquina radial o la cortadora de rubí.
En esta foto podemos ver como uno de nuestros alumnos macea una de las piezas para que su ajuste sea perfecto encima del mortero cola.
En los trabajos de chapados, solamente tenemos colocar azulejos en el cuarto de baño y en el frente de la cocina.
Los azulejos se están colocados de forma apaisada, y estamos procediendo igual que el pavimento pero en sentido vertical. Primero se ejecuto la semana pasada un maestreado de los paramentos mediante mortero de cemento, y se están colocando los azulejos mediante capa fina de mortero cola, utilizando las mismas herramientas que para los trabajos de solados.
En esta fotografía, hay que destacar la habilidad de algunos de los alumnos, para poder hacer los agujeros para el paso de las llaves de paso, manguitos y desagües, sin tener que romper demasiadas piezas. Muy bien chicos.
Etiquetas:
DIARIO DE CAMPO "SALONES PARROQUIALES"
martes, 22 de junio de 2010
¿SABOTAJE O BUENA FE?
Pero nos encontramos un pequeño problema, cuando el miércoles anterior reanudamos los trabajos de colocación de los bancos, los alumnos se dieron cuenta que varios de ellos estaban sueltos.¿POR QUÉ?, vete tú a saber . Alguna mente lucida decidió comprobar que éstos estaban lo suficientemente fijados al terreno. Pero se soluciono el pequeño problema gracias a la inventiva de nuestros alumnos.
martes, 15 de junio de 2010
lunes, 14 de junio de 2010
En clase de Lengua...
A continuación, un relato escrito por nuestra compañera Virginia durante la clase de Lengua.
En un pequeño y lejano pueblo, había un grupo de personas que iban a emprender una nueva experiencia. Todos estaban muy ilusionados con su nuevo trabajo. Éste consistía en acondicionar el lugar más emblemático del pueblo, para dejarlo lo más bonito posible. La gente más mayor eran los más ilusionados y esperanzados con ese proyecto, ya que sólo ellos recordaban la maldición que rodeaba a aquel lugar, y que habían estado guardando durante tanto tiempo; tenían la esperanza que dándole un cambio, la maldición acabaría para siempre.
Con el transcurso del tiempo comenzaron a ocurrir cosas extrañas, pero nadie se percataba de ello.Desaparecían herramientas de trabajo y todos estaban seguros de que habían sido robadas.Comenzaban a trabajar con el día soleado, y de pronto el cielo se encapotaba,las tormentas les obligaba a parara el trabajo.
Plantaron árboles que, a pesar de sus muchos cuidados, permanecían tristes. Arbustos grandes y pequeños,de flores multicolores, donde las flores no aparecían nunca. Los trabajadores estaban empezando a desesperarse, pero como no desistían, todo su trabajo comenzó a dar fruto y aquel lugar se iba transformando de frío y lúgubre en alegre y primaveral.
El proyecto llegó a su fin, y todos los que habían participado en él decidieron hacer una fiesta en dicho lugar para celebrarlo. Los ancianos rezaban para que todo hubiese terminado, pero la maldición seguía latente y, cada vez más enfurecida por no haber conseguido nada.
Llegó el gran día y todos lo estaban festejando,comiendo, bebiendo y pasándolo bien, cuando emprezaron a sentir sensaciones extrañas y a sufrir mutaciones.A todos se le empezó a caer el pelo, y en su lugar le salieron plumas, sus ojos se volvieron trasparentes, sus dedos comenzaron a alargarse y sus espaldas acabaron curvadas, nadie entendía nada.
Sólo una persona, la profesora, escapó de la maldición por no haber podido asistir a tiempo a la fiesta, y los ancianos le dijeron que no se acercara allí y le explicaron la maldición. La única forma de acabar con todo era recuperar una antigua campana que había sido robada tiempo atrás, y colocarla en su sitio, pero no tenían mucho tiempo para hacerlo.Sin perder un instante, la profesora comenzó a hacer sus investigaciones hasta conseguir encontrar la campana, sus alumnos eran demasiado buenos como para no hacer nada.
En unas horas la campana estaba en su sitio y todo volvió a su estado normal. Nadie recordaba lo que había pasado.Los ancianos siguieron guardando el secreto, la profesora se unió a ellos y la maldición se fue para siempre.
En un pequeño y lejano pueblo, había un grupo de personas que iban a emprender una nueva experiencia. Todos estaban muy ilusionados con su nuevo trabajo. Éste consistía en acondicionar el lugar más emblemático del pueblo, para dejarlo lo más bonito posible. La gente más mayor eran los más ilusionados y esperanzados con ese proyecto, ya que sólo ellos recordaban la maldición que rodeaba a aquel lugar, y que habían estado guardando durante tanto tiempo; tenían la esperanza que dándole un cambio, la maldición acabaría para siempre.
Con el transcurso del tiempo comenzaron a ocurrir cosas extrañas, pero nadie se percataba de ello.Desaparecían herramientas de trabajo y todos estaban seguros de que habían sido robadas.Comenzaban a trabajar con el día soleado, y de pronto el cielo se encapotaba,las tormentas les obligaba a parara el trabajo.
Plantaron árboles que, a pesar de sus muchos cuidados, permanecían tristes. Arbustos grandes y pequeños,de flores multicolores, donde las flores no aparecían nunca. Los trabajadores estaban empezando a desesperarse, pero como no desistían, todo su trabajo comenzó a dar fruto y aquel lugar se iba transformando de frío y lúgubre en alegre y primaveral.
El proyecto llegó a su fin, y todos los que habían participado en él decidieron hacer una fiesta en dicho lugar para celebrarlo. Los ancianos rezaban para que todo hubiese terminado, pero la maldición seguía latente y, cada vez más enfurecida por no haber conseguido nada.
Llegó el gran día y todos lo estaban festejando,comiendo, bebiendo y pasándolo bien, cuando emprezaron a sentir sensaciones extrañas y a sufrir mutaciones.A todos se le empezó a caer el pelo, y en su lugar le salieron plumas, sus ojos se volvieron trasparentes, sus dedos comenzaron a alargarse y sus espaldas acabaron curvadas, nadie entendía nada.
Sólo una persona, la profesora, escapó de la maldición por no haber podido asistir a tiempo a la fiesta, y los ancianos le dijeron que no se acercara allí y le explicaron la maldición. La única forma de acabar con todo era recuperar una antigua campana que había sido robada tiempo atrás, y colocarla en su sitio, pero no tenían mucho tiempo para hacerlo.Sin perder un instante, la profesora comenzó a hacer sus investigaciones hasta conseguir encontrar la campana, sus alumnos eran demasiado buenos como para no hacer nada.
En unas horas la campana estaba en su sitio y todo volvió a su estado normal. Nadie recordaba lo que había pasado.Los ancianos siguieron guardando el secreto, la profesora se unió a ellos y la maldición se fue para siempre.
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